“Limitamos la cantidad de tecnología
que usan nuestros hijos en casa”
Steve Jobs
Mi esposa y yo nos preguntábamos cuáles serían las primeras palabras que pronunciaría nuestra hija pequeña. Hace dos días dijo con claridad: “Pepa Pig, Peeeepa Pig”. Nos miramos y nos reímos. Después de la risa vino la reflexión sobre el uso de la tecnología en nuestra casa. Sin darnos cuenta, habíamos caído en lo más cómodo y dejábamos a los hijos en manos de la niñera tecnológica. Una tarde decidí apagar la tv, que por lo general permanecía siempre como música de fondo, y sucedieron cosas buenas.
Los autores del libro Screen Schooled: dos profesores veteranos exponen cómo el uso excesivo de la tecnología hace que nuestros niños sean más tontos afirman que la adicción a la tecnología mata la creatividad y limita las relaciones sociales. En su libro reportan que el riesgo de depresión en adolescentes es 27% mayor cuando hacen uso de las redes sociales desde su celular, que la probabilidad de recurrir al suicidio también es mayor entre los jovencitos que usan más de tres horas diarias sus dispositivos electrónicos.
¿Qué puede suceder en tu casa si apagas la tv unas horas? En la nuestra sucedió algo mágico: jugamos (mamá, papá y tres hijos) a la “papa caliente” con muñecos de peluche que aceleraban con la cuenta regresiva. Conversamos, nos dimos un abrazo grupal bastante espontáneo, también hubo algo de lucha grecorromana, al final hasta nos pusimos a leer.
Tan cerca que estábamos, pero estas nuevas tecnologías a veces se comportan como barreras invisibles y nos convierten en extraños entre los nuestros.
Antes del COVID crecía el uso y la adicción a las nuevas tecnologías en todo el mundo. A partir del COVID el uso de Internet, laptops, tablets y smartphones se ha hecho imprescindible. Tenemos la excusa perfecta para usarlos a toda hora.
Nos encontramos en un momento de inflexión en la historia de la humanidad. Las nuevas tecnologías nos permiten trabajar y estudiar desde casa, nos hacen ahorrar gasolina y permanecer resguardados de posibles contagios. Pero su uso prolongado genera adicción y aislamiento dentro de nuestros hogares, potencia en nuestros hijos una personalidad frágil, codependiente de los likes, nos orilla a vivir en ese mundo alternativo, a menudo deshumanizado y frío.
Por algo Bill Gates y Steve Jobs, que conocían los mecanismos profundos de las nuevas tecnologías, preferían que sus hijos no tuvieran estos aparatos, sino hasta una edad de mayor madurez. ¿Cómo podremos invitar a nuestros familiares a salir de la burbuja digital para vivir de verdad?
(Publicado en la revista asfamilia.org diciembre 2020)